miércoles, 30 de abril de 2008

Memorias de un desmemoriado.



He conocido muy poca gente en mi vida capaz de agredir con la mirada, algunos actores y a Andrés, un cincuentón Andaluz que a la mínima hacía patria chica recordando su Jerez natal.

Andrés era (supongo que aún es) un tipo corpulento con muy poco pelo. Su mirada por encima de las grandes gafas que siempre le acompañaban era capaz de producir pánico al personal a su cargo como jefe de zona de una empresa de alimentación. Su labor consistía en eso, era un acojonador nato a la antigua usanza, al que la gente respetaba por que le temía.De super en super, Andrés visitaba, hacía entrevistas de trabajo al personal de nueva incorporación, pegaba cuatro acojonantes gritos al encargado, rozando siempre la ilegalidad del insulto, y cuando salía de la tienda todos trabajaban asustados, hasta la próxima. Una escuela, la antigua, que entendía más de miedos que de recursos humanos.

Era muy joven el día que le conocí, buscaba un trabajo para los meses de Julio y Agosto y un conocido me envió a los brazos de Andrés, avisandome de antemano de la peculiaridad del personaje. La entrevista de trabajo era para mozo de almacén, en los meses en que la gente fija se iba de vacaciones. Andrés, me enteré más tarde, tenía dos preguntas o peticiones clave para sus entrevistas de trabajo, primero te preguntaba que harías si vieras robar a un compañero, y luego te pedía que te quitaras un zapato para verte el calcetín. ¿Les suena a ciencia ficción?. Creanme, era así.

Un joven delgaducho, como yo, me hizo pasar a su despacho a hacer la entrevista de trabajo, Andrés me observaba por encima de sus gafas, un par de preguntas familiares, y a la tercera a saco.

-¿Qué harías si ves a un compañero robar?

- Pués mire, es de suponer que yo con ese compañero tendría más relación que con el jefe de esta empresa, por tanto, le pediría que no lo hiciera en principio, y si insistía, lo pondría en conocimiento del encargado.

Creo que Andrés quedó gratamente sorprendido con mi respuesta, por no ser la típica supongo de "pues me chivo", y me pidió que si me podía quitar el zapato para verme el calcetín. Me sorprendió, no lo niego, pero me quité el zapato y le enseñé mi calcetín negro.

Según la lógica aplastante de Andrés, las dos premisas que él consideraba imprescindibles para empezar a trabajar en aquella empresa se habían cumplido, la primera le había demostrado que era capaz de razonar, y la segunda, más importante para él, que era capaz de obedecer. Y por ello me contrató, no sin antes decirme "vas a ser el tercero de abordo (traducido el ultimo mono) y tú labor es de las más importantes para este centro (traducido, el pringao que vá a currar físicamente de todos los que hay reponiendo y descargando). Me hizo una irrechazable oferta de 62.000 pelas y de doce a catorce horas de curro al día, de Lunes a Sábado, que acepté sin dudar.Me avisó de que allí estábamos para vender, y ese era nuestro objetivo y ganancia.

Ese trabajo me sirvió, y mucho, para hacerme una persona abierta al público, era bastante reservado hasta que empecé a "marujear" con las clientas, que me cojierón especial cariño enseguida por mi desparpajo, pero con lo que no contábamos ni Andrés ni yo, era con que durante las vacaciones del encargado, el segundo de abordo (como decía él) iba a ser operado de urgencia de apendicitis, lo cual sin comerlo ni beberlo, tras quince días de experiencia me dejaba al cargo de diecisite personas, acojonadas añado. Durante tres largos días Andrés me formó para encargado, a su manera "el que se mueva no sale en la foto" solía decir, me integró en la cultura del miedo como forma de respeto, y bueno, uno que siempre pone empeño en lo que hace, lo que no sabía por falta de experiencia, siempre lo suplía con horas de trabajo. Mi madre en aquel entonces me pidió una foto para verme de vez en cuando.

Tras esos tres días el partió y me dejó sólo al mando del barco, y claro, un mocoso como yo enfrentado a una plantilla muy mayor, sólo podía tomar la decisión que tomó, no hacer ni puñetero caso de ninguna de sus enseñanzas y hacerme respetar por mi mismo y sin miedos. Habidas cuentas de la falta de cariño que tenía la plantilla, no me costó mucho formar una piña que funcionaba como un reloj Suizo, sin amenazas ni coacciones, durante ese mes y medio eso se notó en la gente, y por extensión en las ventas, la gente estaba más relajada y eso el público lo notaba en el trato, ya no querían joder a la empresa, ni les daba lo mismo cualquier queja, esa gente se estaba iniciando sin darse cuenta en un nuevo tiempo para ellos.

A Andrés le pillé el tranquillo muy rápido, se trataba de decirle a todo que sí, y hacer luego lo que te salía de las narices.

Finalizó mi contrato de dos meses y en ese día como decía la carta de cese tenía a mi disposición el finiquito correspondiente, que Andrés vino a entregarme en mano. Me abrazó, me felicitó, y me pidió que volviera cuando quisiera y sin cara de loco ni nada. Me despedí de todos, emocionado, y salí de allí a continuar con mi vida de juvenil pendon irresponsable. Bueno, así hubiera sido si no fuera por que al tercer día me llamó el jefe de Andrés para ofrecerme su puesto. Si aceptaba de degradaban a jefe de tienda.

A todo el mundo siempre le he recomendado cojer lo bueno de las pesonas y olvidarse de lo malo, de Andrés me quedó una frase y el resto creo que puede olvidarse, "cuando tengas que decirle a alguién cabrón, no le digas cabrón, dile que te parece que le están creciendo los cuernos".

martes, 29 de abril de 2008

襟怀 jīn huái :螞蟻上樹, ( y 4)



Tierra trágame, pensaba yo al ver que me quedaba fuera mientras la puerta del baño de 1.80 de largo por 1.20 de ancho (según legislación vigente) me daba en las narices. Al momento escuché un leve zumbido y pequeños gemidos que provenían de dentro. Mi boca abierta acompañada de la cara de gilipollas que se me había quedado mirando la puerta entornada, es lo que debió de sorprender al Chino cuando irrumpió en el baño gritando:

- ¡¡QUE PASAL AQUÍ¡¡

Esta es la mía, pensé,. Ahora sí que la lío, y levantando mi dedo señalé la puerta entornada, el Chino Feliz alargó sus pasos hasta la puerta y la entreabrió, en ese momento los gemidos ya eran gritos de placer, mientras el hombre corpulento penetraba a Estrella, su rubia acompañante se introducía el consolador.

-OHHHHHH dijo el Chino bajándose la bragueta de su negro pantalón.

¿Quién coño dijo que los Chinos la tienen pequeña?. Por fin pude enterarme de por qué a este Chino le acompañaba siempre una sonrisa, sus treintaysiete centímetros (y medio) de humanidad bajo el pantalón harían sonreír a cualquiera. Estuve a punto de preguntar si la alimentación a base de hormigas y lagartos era beneficiosa para el desarrollo del miembro, pero de nuevo la puerta me dio en las narices bajo la atenta mirada de Estrella, que gozaba doblemente al ser penetrada y al verme totalmente fuera de sitio.

La situación empezó a recordarme a aquel camarote de los hermanos Marx en una noche en la ópera, pero bastante más guarro entre gemidos, gritos y consoladores, ya cabía poca gente en ese pequeño habitáculo.

De nuevo se abrió la puerta del baño para que irrumpiera otra persona en él. Pensé rápido.

-Me tocó la China

La verdad es que viendo el aparato que se gastaba el Chino era toda una responsabilidad que me tocara la China. Se dirigió también hacia donde escuchaba gemidos y abrió de nuevo la entornada puerta. La situación había cambiado bastante, el Chino feliz tenía de espaldas contra la pared a la rubia mientras la penetraba violentamente. Ella se retorcía y gritaba sin ningún tipo de rubor. Estrella estaba sobre el inodoro, agarrada con sus brazo a la cisterna alta y totalmente abierta de piernas mientras el hombre corpulento medio sentado en la taza buscaba petróleo entre sus piernas.

La China quedó inmóvil mirando la escena y yo la giré hacia mí. En un gesto de autocomplacencia abrí mis brazos en cruz llamándola para que viniera,"ven a mi y gozaremos los dos" y vino, aunque no para lo que yo esperaba, vino para sacudirme una patada de futbolista en las mismísimas pelotas que me dejó amargado de rodillas en el suelo.

-Lagarto, lagarto, pude decir mientras intentaba encontrar la respiración perdida. Estrella cambió los gemidos por las carcajadas y el Chino se quedó blanco, volviendo a enfundar su pene en el pantalón al segundo. Con gestos y aspamientos la China empezó a recriminar al ex-sonriente Chino Feliz, algunos gritos en su idioma y el Chino salió disparado del baño dejando desconsolada y sin consolador a la rubia, que permanecía apoyada en la pared a breves pasos del orgasmo. La mujer China miró el estado en el que había quedado la rubia, su cara de excitación dejaba claro que estaba a punto del orgasmo, de no haber sido por su intervención lo habría hecho ya. La China la miró, compasiva, para decir...

-En el restaulante nuevo mundo, todo el mundo sel feliz, y cojer el consolador para metérselo a la rubia hasta lo más profundo de su ser.

Si, ciertamente en el restaurante nuevo mundo casi todo el mundo, era feliz, todos, todos menos uno, que seguía buscando su respiración perdida tumbado en el frío suelo del baño.

------------------------------------------------------------------------------------------------


La noche cerrada se veía a través de una pequeña ventana del local. Los ruidos de bandejas en la cocina, la tenue luz de dos lámparas rojas de pared y las persianas medio bajadas eran claro indicativo de que el restaurante Chino nuevo mundo estaba cerrando sus puertas.

Tras la barra el Chino feliz cazador de hormigas y lagartos me servía mi cuarto Ballantines con hielo dos horas después de salir del baño. Seguían dentro Estrella, el hombre corpulento, la rubia esbelta y la China , era de suponer que la orgía se les había alargado en exceso, mientras yo me emborrachaba con la idea en la cabeza de haber perdido un buen "rollo de primavera".

Empecé a cantar tras el primer trago del cuarto whisky, mirando al Chino fijamente...

- una hormiguita se balanceaba, sobre la tela de una arañaaa, comoo veiaaa que no se caiaaaa, fué a llamarr a otra hormiguiiiitaaa .

El Chino me miró desconcertado sin entender muy bien lo que cantaba.

-Tócala otra vez Chino, dije mientras yo mismo me partía de risa retozándome sobre la barra.

-¿Té refieles a esto? preguntó el Chino poniendo sobre la barra sus treinta y siete centímetros (y medio) de humanidad.

Desperté a la mañana siguiente intentando recordar lo sucedido con un tremendo dolor de cabeza. Creí recordar que en el restaurante nuevo mundo, casi todo el mundo era feliz, El Chino y la China sonriente, el hombre corpulento y su novia, Estrella, a la que jamás volví a ver, desde luego en ese restaurante se esmeran en conseguir la felicidad de sus comensales, lo que no recordaba muy bien es a qué se debía cierto escozor en mi ano......




Sacabó.

lunes, 28 de abril de 2008

Las edades del hombre



Dicen que a diferencia de la mujer, y para envidia de ellas creo yo, al hombre le cuesta madurar más y mantiene retenido su espíritu de niño durante más tiempo. En el despertar amoroso cuando un hombre va, una mujer ya ha vuelto unas siete veces, se enseñan antes en las artes del amor por que a diferencia de nosotros, ellas están más curtidas, más "acosadas" por el sexo opuesto, ellas son sin duda más adultas con menos años que nosotros.

Llega un momento en que nosotros también crecemos mentalmente, y nos preocupan e inquietan la mismas cosas, pero creo que una parte de nuestro cerebro sigue teniendo escondido a aquel gamberrote infantil que mostramos a la menor oportunidad, ya sea vía cibernética o entre personas, creo que hay gente que hasta utiliza el medio Internet para ello, o algunas reuniones familiares con gente de confianza, donde uno deja de ser la persona seria y responsable que se le supone, para convertirse en un gamberro chistoso, un enano mental en potencia que sufre una regresión a su infancia, donde no preocupaba la consecuencia del que pasará, sino el ahora estoy haciendo. Un ejercicio de irresponsabilidad para una persona que se supone adulta es mostrado a los ojos de los que le creen respetable y responsable. Señoras, esos momentos para un hombre son impagables, y todos nosotros hemos sentido ese impulso alguna vez, el de dejar de ser adultos durante un pequeño espacio de tiempo para recordar lo que sentíamos de niños, para no preocuparnos por las consecuencias de un acto concreto.

Aquel día el parque estaba vacío. Un bastidor metálico sujetaba las seis cadenas de tres columpios, dos de ellos estaban ocupados por dos niñas muy guapas y el que quedaba justo en el centro estaba vacío. - ¡Papá empuja¡decían las niñas. De pronto sucedió, sin más. Cuando las niñas tomaron la altura apropiada el columpio vacío del centro me miró. Lo juro, me miró fijamente y un suave vientecito de poniente lo movió muy despacio delante y detrás, delante y detrás, mientras las cadenas poco engrasadas emitían un casi inaudible sonido ñic-ñic. Mientras lo miraba fijamente el viento se hizo voz, y pude escuchar que me decía "suuuubeeeee, subeeeeeee" mientras yo sorprendido miraba a uno y otro lado del parque asegurándome de que realmente estábamos solos, de que era el columpio el que me hablaba y que no había ninguna persona observando lo que me estaba pasando. Disimuladamente tomé asiento en él, dejadomé caer como el que no quiere la cosa, poniendo las manos sobre mis rodillas y no sobre las cadenas, pero él no quería dejarme tranquilo así, el viento envió su nuevo mensaje "empuuujaaaa, vueelaaa altooo, tocaaa las estrellass". Empezó con un suave contoneo de caderas hasta que decidí tomar impulso con todas mis fuerzas. Subí hasta el cielo -Papá que alto¡¡ decía la niña mientras yo me impulsaba como un poseso con las cadenas, estirando y encogiendo las piernas, tocando casi la espalda con el suelo al plegarlas, parecía que le iba a dar la vuelta cuando decidí poner el remate y saltar del columpio en marcha cuando llegara a su punto más alto. Tomé impulso y flllassshhh, caí de pie en la parte de delante ante la mirada atónita de las niñas. Levanté mi brazo hacia ellas en un saludo entre circense y torero, y pude ver a mi vecino el estirao tras los columpios que me dijo:

- Que bien nos lo pasaamosss ehhhhhhhh

jueves, 24 de abril de 2008

El número de LA BESTIA

En La Biblia se cita el número 666 relacionado con el Anticristo o Satanás.

"Aquí hay sabiduría: El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis" (Apocalipsis 13:18).

Según la doctrina religiosa Cristiana el 666 es el número que impondría el Anticristo en la frente o la mano derecha de cada ser humano cuando se convirtiera en el gran dictador de la tierra, aunque fué realmente y a traves de la pelicula "La profecía" (Richard Donner, 1976), cuando el número de la bestia empezaría a ser conocido por todos, y citado en montones de pelis desde entonces.

Desde entonces grupos de heavy y fieles seguidores, empezarón a hacer gilipolleces várias como escuchar discos al reves, que se suponía contenían mensajes ocultos del mismisimo Satanás, en vivo y en directo, para todos nosotros. Claro, yo me pongo en mi tocadiscos un disco al revés y me lo cargo, o sea que deberían hacerlo a mano y muy despacio, y probablemente se oiría algo asi como wooooo wooooo woooo lkjkdooo wo-wo, que como todos sabémos, es claramente escrito un mensaje del Anticristo, que podémos interpretar de mil maneras.

Tras la ruptura de miles de tocadiscos (de los de antes) entre esa sociedad montada entre los grupos heavys y las empresas que vendían tocadiscos, agujas y complementos, el número de la bestia ha sido más asociado a modelos de impresos de la Hacienda pública, el 666 ha dejado paso al 110, 115, y 130 entre otros, trimestrales, y al modelo nº. 100, Impuesto sobre la renta de las personas físicas, o sea en Cristiano (ya que hablámos de ellos) la puñetera declaración de la renta.

Vamos, no me digan ustedes que no dá más miedo que el Anticristo.

miércoles, 23 de abril de 2008

El cazador de orgasmos.

En el día que vino al mundo Jean-Baptiste Grenoulle fue dotado con un don que le diferenciaría para siempre del resto de los humanos, el poder de saber diferenciar y matizar todos y cada uno de los olores de la tierra. Jean-Baptiste pasó su infancia olisqueando todas y cada una de las personas o cosas que se cruzaron en su camino, diferenciando, diseccionando cada uno de los olores que su cerebro era capaz de asimilar por separado y guardar como si de un disco duro potente se tratara.

Ya en su pubertad, Grenoulle empezó a sentir la llamada del sexo, a pesar de no estar enseñado en las artes del amor asimiló su primer olor a orgasmo en una masturbación cuando contaba con quince años. Decidió cojer un pequeño frasco que le recordara tan maravillosas e inesperadas sensaciones y dentro introdució un bello púbico de su propio cuerpo y un pequeño trozo de piel arrancada de junto a su uña. En la etiqueta del frasco Jean-Baptiste rotuló "La sensación desconocida" como título a ese recuerdo en forma de olor que quería guardar para siempre.

Fué unos años después, en su primera relación sexual con una mujer, cuando Jean-Baptiste se dió cuenta de que todos los orgasmos no eran iguales, y se decidió a cazarlos y catalogarlos como recuerdo a unas sensaciones que no siempre eran las mismas, aunque en el final si eran muy parecidas, cada una de ellas era distinta en su matización propia, en su sensación que le dejaba en el cuerpo. Jean-Baptista no sólo diseccionaba olores, también las sensaciones que en su cuerpo dejaba dicho orgasmo. Así fue como a su primer encuentro amoroso conjunto, con Marie, previo pago de veinte Francos en el bajo Paris, decidió titularlo en su frasco como "Rapidez inusitada y falta de control".

Grenoulle se hizo todo un profesional de la caza y captura de los orgasmos más variados, siempre asociado y mucho al tipo de persona con la que compartía lecho, ya era sabedor a estas alturas de que nunca tendría dos orgamos iguales por su don. Pronto su estantería empezó a adornarse con decenas de frascos titulados, "Dulce final" aquel día que estuvo con la pastelera, "placer salvaje" con la carnicera del barrio que le mordía y arañaba durante el acto sexual, "Insatisfacción matrimonial" con la mujer del Gobernador que le cabalgó hasta la saciedad, de todas ellas guardaba un bello púbico que paseaba por su ombligo sudoroso antes de colocar cuidadosamente en el frasco, y así captar la esencia de su olor a través del sudor que su propio cuerpo, ese olor que su cerebro ya tenía asimilado y diseccionado.

Un día Jean-Baptiste miraba detenidamente sus frascos, como ese cazador que observa las cabezas que tiene colgadas en su colección, buscaba cual sería la pieza que le faltaba para completarla. Se dio cuenta enseguida de que su colección nunca estaría completa sin un orgasmo con amor, tenía de todos y muy variados, pero le faltaba uno de amor verdadero, ya que Grenoulle nunca había estado enamorado. Decidió completar la colección cortejando muy lentamente a la joven Heltbad, una hija del Ministro Alemán con una educación Teutona muy estricta que residía en Paris. Durante dos largos años pasearon agarrados de la mano en una conquista de lo más tradicional, hasta que por fin contrajeron matrimonio en la catedral de Notre-Dame. Al fin Jean-Baptista Grenoulle, iba a consumar sexo con amor para poder terminar esa colección de frascos, durante mucho tiempo incompleta.

Fue en la noche de bodas y tras un acto sexual lleno de gritos y pasión cuando Grenoulle quiso hacer su habitual rito de bello púbico con sudor. pero se encontró el ombligo de su amada Heltba sin misera gota de sudor por la que pasar el pelo, estaba más seco que un desierto. Jean-Baptiste Grenoulle cojió un frasco que destapó cuidadosamente, introdujo el pelo de su amada Heltba y rotuló con extremo cuidado. "Amor fingido".


P.d. Vale, no lo hago más, que es el día del libro.

martes, 22 de abril de 2008

El mago y la Coz


En las entrañas del Planeta Pecado estaba ubicado el local de Burt, el ornitorrinco más marchoso de todo el universo conocido. La flor y nata de la galaxia se daba cita en ese local de alterne donde Sam, un multitentáculo de tres ojos del Planeta Negro tocaba en el piano canciones de antaño a un ritmo infernal con su voz desafinada. Sobre la barra de acero un Terricola vestido de bombero se contorsionaba haciendo las delicias de las Orgasmus, del planeta Multiorgasmus, hembras con seis pechos y tres clítoris ubicados a lo largo de su cuerpo escamado. Todo era calma escandalosa en el local de Burt cuando en la barra me senté para pedirle tercer tinto de verano.

Tres tipos muy extraños junto a mí bebían sus copas, un hombre de paja, un hombre de hojalata y un león, y digo extraños no por lo que eran, allí había seres mucho más extraños que ellos, sino por sus sollozos, ya que no paraban de llorar en lo que parecía iba a ser la típica borrachera antidepresión. Sentí lástima de ellos y tras apartar de un leve empujón a la sietebocas del Planena Urano, decidí preguntarles que les sucedía.

- Yo estoy así por que quiero un cerebro, me dijo entre sollozos el hombre de paja.
- Yo estoy así por que quiero valor, soy un cobarde, me dijo el León
- Yo lo que necesito es un corazón, me dijo el hombre de hojalata.

- El valor Señor León está muy sobrevalorado, le dije para animarle, la Galaxia es de los cobardes y no tiene necesidad de valor para nada, el miedo es muy lícito en todos los seres humanos y cada uno tenémos nuestros temores, hasta creo que es bueno tener miedo a algo ya que eso demuestra que somos humanos.
- No lo había visto desde ese punto de vista, me dijo el león.
- Hombre de hojalata, el corazón si no sabes usarlo sólo guarda resentimientos, el verdadero amor nace en el cerebro, tampoco le es imprescindible para vivir bien ya que nunca tendrá un desengaño amoroso por ejemplo, por tanto será más feliz y hará felices a otras personas con los sentimientos generados por su cerebro.

Al terminar mi alegato me día la vuelta sobre ellos y bebí de mi tinto de verano, hasta que el hombre de paja golpeó suavemente mi espalda para reclamar mi atención.

- Oiga, que a mi usted no me ha dicho nada para animarme.

- Ah, si, perdone, tiene razón, en el periodico El Mundo hay una vacante para usted.

lunes, 21 de abril de 2008

El perjurio ortografico de las letras mayusculas viene dado unas veces por desconocimiento, otras por mero interés. Las reglas ortográficas con las letras mayusculas están bién definidas, luego vá en función de lo que quién escriba, quiera expresar, para su buena utilización.

Si lo que pretendémos es ridiculizar o dejar bien claro nuestra no creencia de algo en concreto, podémos usar diminutivos, mucho menos sutilies, pero más eficientes, como Diosete, o Almodovarcito, o cambiar directamente La Biblia, por el Libro gordo de Petete que leen los curas, hemos respetado la ortografía y ha quedado bién claro nuestro criterio.

Es sin embargo más costoso, y ahí si podémos utilizar una doble regla ortográfica no escrita, cuando querémos ridiculizar algo, pero su nombre es bonito, incluso con diminutivo, como por ejemplo Esperanza, corrémos el riesgo de que Esperancita caiga mejor visualmente al lector que el propio nombre, por su doble significado, entonces deberémos asociar ese nombre a un adjetivo o a otro nombre propio que deje bién claro a nuestro lector que Esperanza es bonito nombre, pero no nos cae excesivamente bien. Por ejemplo Esperanza la del Fede, con nombre asociado, o Esperanza la superliberalquetecagas.

Bueno, entiendo que con estas pequeñas reglas a veces nos podemos parecer más a Flanders el de los Simpson, pero vamos con un ejemplo gráfico:

Marianito y Esperanza la del Fede superliberalquetecagas están a la greña por mandar en el PP.

En una pequeña frase hemos dejado claros los conceptos básicos, no hemos opinado pero subjetivamente ha quedado más claro que escribir el Señor Rajoy y la Sra. Aguirre, lo cual denotaría cierto respeto que la frase anterior no tiene, como tampoco tiene falta de respeto.

Entonces, y ahí vienen mis dudas, si yo que soy un asesino de la ortografía, puedo hacerlo, supongo que muchos columnistas y escritores que cobran por ello, deberían también saber como escribir de una Ministra de Defensa EMBARAZADA, por que es de suponer que todos esos señores y señoras han tenido una madre que les engendró, es de suponer también que la conocen y que la tendrán que mirar a la cara tras escribir hilarantes frases echas de menosprecio hacia la mujer, hacia esa mujer, hacia todas las mujeres, incluso hacia la madre que los pario, en unos tiempos en los que se intenta erradicar la cultura machista y que la mujer sea lo que es, un igual y no un porta bebés en serie.

La derechona más rancia del mundo desenvaina sus plumas como arma de división entre personas, no entre partidos politicos,ni ideas, entre personas que se supone no pueden ser discriminadas por razón de sexo, ideas o religión, y hace sangre de esto postulandose como lo que son, almas en pena que no conocen ni a su madre.

viernes, 18 de abril de 2008

Pajarico.

Día 2

Estimado Señor:

No sabe como le agradezco que haya respondido mi correo sobre las dudas en referencia al canario que compré hace bien poco, y por qué opinaba que él, no cantaba. Es cierto, no había pensado que el animal pudiera estar desorientado, he seguido al pie de la letra todos sus consejos y le cambio el agua todos los días, le he buscado un sitio apropiado y además come esa mixtura tan rica en vitaminas y algo de calabacín. Sigue sin cantar pero supongo que es cuestión de tiempo.

Día 4

Estimado Señor:

He estado sopesando la posibilidad de que mi canario, sea sordo de nacimiento, por que cuando lo saco a la terraza, donde se escuchan otros canarios como el de algún vecino, tampoco se lanza a contestarles. Como usted bien me responde, he decidido tener un poco más de paciencia con él, y evitar las corrientes de aire.

Día 6

Estimado Señor:

¡ Gracias a Dios¡ ¡ El canario ha emitido sus primeros sonidos en forma de gorgorito¡. Yo no lo he escuchado aún pero me lo han contado. Le he comprado para celebrarlo una gran jaula blanca con tejadillo azul de lo más amplia. Muchas gracias por sus sabios consejos.

Día 9

Estimado Señor:

¡Tengo en casa al Plácido Domingo de los pájaros¡. Qué soltura, qué prodigioso canto que me alegra cada mañana al despertar, es un no parar oiga, todo el día desde que sale el sol hasta que se pone. Es increible como alegra la casa con su gracil canto.

Día 14

Estimado Señor:

Me preguntaba si usted conocería alguna manera humana de callar a este pajarico, es que no para, todo el día dale que te pego, empiezo a estar un poco harto del mismo politono y me molesta el sonetillo cuando leo. Aunque lo deje fuera de casa, lo escucho igual, estoy probando a no cambiarle el agua en toda la semana a ver si coje una infección de garganta.

Día 21

Estimado Señor:

¿Pero como que me lo cargue? ¿Me está sugiriendo que me lo cargue?. ¡pués ganas me dan¡¡. Durante unos días de vacaciones me he hecho un aficionado a Curling y sabe de la diferencia horaria con Cánada a la hora de verlo.¡¡pués el puto pájarito se ha acostumbrado al mismo horario¡¡. Ahora ¡¡canta por la noche y duerme por el día¡. Llevo ya dos días sin pegar ojo y los vecinos empiezan a mirarme mal.

Día 24.

Jajajjajaaj jajajjajajajaj jajajajaja esto es la guerra estimado Señor jajajajjaajaja, le he pintado la jaula de negro previa impregnación con minio, y le estoy dando de comer patata cocida jajajajaj jajajajajaja, si quiere guerra la vá a tener, lleva un mareo del olor a pintura que te cagas, jajaja mi mujer dice que igual me estoy obsesionando un poco, pero creo que ¡¡le he visto llorar cuando le tapé la jaula con una toalla¡¡. jajajajaja, por fin se ha hecho el silencio jajajaja.


Día 26

Estimado Señor:

Mi mujer me ha dicho que eso no es forma de tener un canario, mis hijas me miraban muy raro y empezaban a darme la espalda, así que lo he donado a "pajarracos sin fronteras", un centro cercano a casa donde estará feliz con otros de su especie, y mis ojos han vuelto a sus órbitas.

Día 29

Estimado Señor:

El Hijodelagranputa del pájaro se ha debido de escapar y lo tengo de nuevo en lo alto de la valla de la terraza cantando, parece que me está observando detenidamente y no se mueve de ahí en todo el día, le he lanzado un cenicero recuerdo de Andorra a ver si le daba, pero lo ha esquivado con soltura y permanece ahí, impasible con su canto.

Día 30


Estimado Señor:

Creo que necesito ayuda especializada, en este momento sobre la valla de mi jardín hay al menos cien pájaros, y en lo más alto mi ex-canario que parece ser el jefe. Gorriones, periquitos, canarios y hasta cinco cuervos parece que están observando todos nuestros movimientos, se van turnando en la vigilancia, me estan asustando, me dá miedo salir a la calle, y empezámos a tener falta de víveres.


Día 32

¡¡NOS ATACAN¡¡ ¡¡SOCORRO¡¡. Los cuervos a decenas se están estampando contra los cristales de mi casa uno tras otro y sobre el mismo trozo de cristal, como si quisieran romperlo, el canario asiste impávido desde lo alto de la valla. Se han cargado la antena de televisión y la linea del teléfono,y estoy conectado a través del wi-fi del vecino, estámos aislados y tengo un bote de insecticida de hormigas en la mano preparado por si rompen el cristal. ¡SOCORRO¡ ¡ MANDENME AYUDA URGENTEMENTE¡¡


miércoles, 16 de abril de 2008

Cocina para principiantes: Pollo a lo que pillo

Amigos, hoy les presento el primer capítulo de cocina para principiantes, donde aprenderémos el gusto por hacer las cosas nosotros mismos, pero sin estresarnos demasiado.
Lo primero que le voy a pedir si no tiene mucha experiencia, es que abra usted su horno a ver si dentro hay una bandeja, que mire que puede ser que estas cosas se las lleva el Diablo, debe haber ahí dentro una superficie plana metálica que entra en una especie de guía que la sujeta.
Bueno, ya la conoce, le presento a su bandeja de horno, gran amiga, se lo aseguro.



El de la foto superior es Anselmo, un pollo eviscerado que comprámos ya bién vacío, y que hemos abirto un poco más para dejar las pèchugas al aire. Anselmo llevaba escrita en su etiqueta una breve mandamiento que decía: "Como buén pollo de mesa, no me cocinarás ni con cerveza ni con coca-cola", por tanto lo que ven ustedes en la foto, nos lo estámos bebiendo y no lo utilizarémos con Anselmo, el más aventajado de los pollos del corral.


Hemos mirado en el frutero y ¡¡oh, sorpresa¡¡, cuatro hermosas naranjas Valencianas de mesa han aparecido por arte de magia, hemos encontrado para este pollo aparte de la naranja, un calabacin, un pimiento verde, unos espárragos trigueros, patata, cebolla, unos pistachos que le he arrancado de las manos a mi cuñado para que no se los comiera, pimentón dulce, aceite de oliva y una buena ramita de romero.


Anselmo merece una buena cama para su descanso eterno, así que se la estámos preparando, lo que usted vé es la cebolla y la patata cortada a dados, la verdad, a triangulitos sería más exacto. Anselmo dejó escrito que ¡¡nada de rodajas¡¡.



Hemos puesto sobre la patata, calabacín, espárragos y primiento verde, y lo hemos salpimentado y puesto un poquito de aceite de oliva. Anselmo ya tiene una cama de acorde a sus expectativas.


Hemos pelado una de las cuatro naranjas, y como ven en la foto se la hemos colocado sobre la pechuga al pollo, y sobre esto la rama de romero, esa naranja y el romero estarán ahí los primeros veinte minutos de horno, y luego la quitarémos, eso hará que su pechuga jamás le salga seca, cuando la quite tras los viente minutos la verá muy poco echa y muy mojada de zumo.
Pero hombre, que el tío este ha dicho que necesitaba cuatro naranjas, ¿para que quiero las otras tres?.



Las otras tres, las vá usted a exprimir y cojerá los pistachos para dejarlos macerar dentro. Yo quiero la sal de ese pistacho en el zumo, y de su cáscara, usted si quiere puede pelarlos antes.
Tenemos el pollo dorando en el horno veinte minutos a 220º, lo sacámos tras ese tiempo, quitámos romero y retiramos, quitámos naranja y dejámos pero no sobre el pollo, más baja, y con ese arte y gracejo que Dios nos ha dado, le desparramamos por encima nuestro zumo con pistachos. (Amigo, esta es la operación más dificil que usted realizará en esta receta, intente que el zumo vaya dentro de la bandeja)




Esta foto es tras veinte minutos de horno, sin romero, con la naranja retirada y con el zumo con pistachos desparramado por encima, que a usted no se le vá a consumir, se le quedará como "caldito". Vuelva a meterlo al horno y suba la temperatura a 230º.



Más o menos, esta será la pinta de su pollo a lo que pillo, retire la naranja antes de servir y me lo ponga usted bién guapo . Tanto la verdura como el pollo, estarán en su punto, sobre todo la verdura que es lo que más nos preocupa, ya que primero se ha horneado sólo, y luego se ha cocido con el zumo. pero no se pierdan el increible sabor de esos pistachos, que no estarán crujientes como en crudo, pero estarán dulcemente melosos.

¿A que no le he hecho currar mucho?. ¡¡Si ya trabaja el horno hombre¡¡



El perro de mi cuñado

Hola, aquí les presento al perro de mi cuñado.

Vaya, debería haberlo expresado de otra manera, parece que les estoy presentando a mi cuñado, que es un perro, pero no, este es el perro de mi cuñado preparado para la final de copa de esta noche... No, aún no me he quedado a gusto, no quiero decir que mi cuñado sea un perro, que no entiendanme ustedes por favor, lo que quiero decir es que esta noche, el perro de mi cuñado viene a casa a cenar y a ver el partido de la final de copa.
Nada, que no me sale escribirlo bien para que no halla malos entendidos, lo intentaré de nuevo.
El perro de mi cuñado (en la foto), esta noche vendrá a casa a ver la final con su dueño, el dueño del perro de mi cuñado, es mi cuñado. ¿Así más claro?.
Jopetas, pero que dificil es expresar lo que uno quiere decir a veces, a ver si poniendo una coma enmedio, queda más claro. El de la foto superior es el perro, de mi cuñado.
Uys, pués no se si ha quedado peor áún. Creo que necesito ayuda. Pensaré como Arkab a la hora de definir al perro de mi cuñado:
"Ese es el perro del cuñado de Trikki, y no se parece en nada a Mamen Mendizabal ni pía".
Diantres, que no, que tampoco lo he arreglado, a ver con Harry Sonfór....como lo definiría él...
"El Buldog Francés de morro chato, orejas puntiagudas y rabo inexistente, con aires de morlaco en miniatura pero sin cuernos, es el perro del cuñado de trikki".
¡¡Dios¡¡. Esto sólo lo puede arreglar Badil, no hay manera humana de conseguir no llamar perro a mi cuñado y definir claramente quién es el perro de los dos. Utilizaré la lógica Badiliana...
"La mancha blanca del perro del cuñado de Trikki parece un mapa de Inglaterra. Levantese del animal, y pongalá al trasluz junto a un muro negro de gran dimensión. A través de la mancha podrá ver las multiples maneras que hay para denominar la palabra trasvase"
¡¡ AGGHHHH¡¡. Helterskelter es la única que me puede sacar de este sin vivir. No puedo más.
"El de la foto superior es el perro del cuñado de Trikki, y la verdad sobre la foto, denoto gran parecido con algún otro cuñado que no es el de Trikki, ahora bién, ese pecho descubierto peludo no se parece nada al de Went, ni al de Benicio Del Toro, aprovecho estas líneas para reivindicar mis derechos como mujer y ya de paso, os pongo a parir a los tíos".
Nada, que no, oigan, que el de la foto es el perro de mi cuñado, ¡¡y ya está¡¡

martes, 15 de abril de 2008

Amigos Latinos, sólo se lo diré una vez.




Se está celebrando el Austrian Cartoon Arward, donde el dibujo de David, amigo de un blog amigo, ha entrado entre los dibujos finalistas. Verá usted, votar en tan fácil como perder medio minuto en registrarse, entrar en su correo, volver a la página http://www.cartoonaward.com/ , buscar el dibujo y darle donde pone voting. Ayer entré a votar, y el dibujo subió cuarenta puestos con mi voto, lo cual me mosquea mucho, por que creo que ustedes, a pesar de las maldiciones que les voy a lanzar día tras día si no lo hacen, no me han hecho ni puñetero caso, por ello, les voy a decir porqué deben votar exactamente.



Para empezar, si quieren visionar el resto de dibujos, observarán que ninguno de ellos le llega a este a la suela de los zapatos, ni en ingenio, ni en imaginación, ahora bién, que usted decide seguir en plan vago y no hacer un par de cliks, si usted persiste en su idea de omitir este mensaje que le lanzo como una llamada de socorro, si usted no vota a este dibujo como favor a este su blog,me declararé en huelga de hambre indefinida, y le pondré diariamente recetas de pan y agua, y además en lugar de las tetas que tanto sé que le gustan, escribire sobre Freud, Goya y Calderón (de la barca, no el presi del Real Madrid), y dejaré de respirar hasta ponerme colorado. No se lo tome como una amenaza, bueno, que coño, tomeseló como quiera pero vote leñe, vote.

Es el momento de que los habitantes de las islas Feedjit que nunca se pronuncian, lo hagan con su voto en la página mencionada, aunque la verdad, siempre he pensado que el tío fiyi pone la bandera donde le dá la gana, pero bueno, que Gallegos habémos en todos los sitios.

¿Sabe usted lo que sería tenerme tras su oreja día tras día pidiendo su voto?.


Usted mismo, ya sabe lo que le espera o esto....



O esto...


Vamos hombre, que no es tan dificil, hágame el favorcillo que no puedo con Freud.

襟怀 jīn huái :螞蟻上樹, (3)



Sin mediar palabra Estrella dejó de presionar, aunque su pie seguía en posición. Al dejar de sentir la presión me di cuenta de que mi pene había adquirido una proporción desmesurada, estaba realmente excitado, en ese momento la hubiera cojido y desparramado encima de la mesa para penetrarla, a no ser de estar en un sitio público donde las hormigas se comían. Estrella debió ver mi cara de deseo por que al momento reinició su masaje, esta vez aún la notaba más. Coloqué mis manos sujetando la cabeza, con los codos apoyados en la mesa para taparme la cara, para que nadie pudiera ver que mis ojos empezaban a ponerse blancos de placer. El cazador había sido cazado.

Ni en mis fantasías más irreverentes había soñado con una situación así, en pleno local público, Estrella había conseguido cegarme de deseo con tan sólo un pie y su mirada lasciva.

-¿Te gusta ehh?, me dijo Estrella mientras su presión se hacía mayor.

-Te gusta jugar, ¿verdad?, conseguí decirle con mi voz entrecortada.

- No sabes como, me contestó con su voz sensual.

-Pues si quieres jugar juguemos, le dije intentando volver a cojer las riendas de lo que creía mi partida ganada. ¿Ves a aquel tipo en aquella mesa que está solo?.

Estrella giró la cabeza hacia donde yo dirigía mi mirada, un hombre corpulento de mediana edad terminaba de cenar en ese momento de espaldas a nosotros, y pedía su postre al camarero feliz.

-Si, le veo, ¿qué pasa con él?

- Apuesto a que no eres capaz en cinco minutos de llevártelo al baño de caballeros y excitarlo tal y como has hecho conmigo. Si eres capaz y entras con él al baño, en cinco minutos entraré yo y veré el resultado. ¿Te atreves?.

Estrella ni si quiera contestó, me lanzó una mirada desafiante de mujer retada, levantó su pie de mi pene y se calzó el zapato, antes de 30 segundos ya estaba sentada junto a el hombre con la mejor de sus sonrisas.

En el restaurante nuevo mundo todo el mundo era feliz, yo mismo de ver que Estrella hacía lo que le pedía, el alegre camarero con su restaurante lleno, Estrella que se había dado por retada y el desconocido hombre corpulento, que se había encontrado una agradable compañía sin esperarlo.

Mis esfuerzos por escuchar algo de la conversación eran vanos, no podía entender nada de lo que ellos hablaban, pero los gestos del hombre corpulento no daban lugar a ninguna duda, estaba a gusto junto a Estrella. No habían pasado cuatro de los cinco minutos cuando observé que se levantaban, primero ella, al segundo él, desde mi sitio pude observar donde se dirigían sus pasos... al lavabo de caballeros. Miré mi reloj. Cinco minutos para entrar.

Una hormiguita, se balanceaba sobre la tela de una araña
como veía que no se caía, fue a llamar a otra hormiguita.

Dos hormiguitas se balanceaban sobre la tela de una araña....

Mi pensamiento estaba situado en cosas tan importantes como la canción de las hormiguitas dejando que pasaran los minutos de espera.

El Chino, asesino de lagartos y hormigas los domingos por la mañana y embaucador con sonrisa de hojalata en sus ratos de camarero, seguía poniendo cafés a dos manos y con una graciosa botella que contenía un lagarto disecado de mesa en mesa.

Un lagartito se balanceaba sobre la tela de una araña...
como veía que no se caía... fue a parar a una boteeeella...

Posiblemente el Chino era excesivamente joven para haber nacido en el año que asesinaron a Kennedy, pero con ese historial que se le suponía yo, no descartaba la posibilidad de que algo hubiera tenido que ver.

Pasado el tiempo decidí levantarme y dirigirme hacia el baño, pero algo me detuvo en seco al pasar por la mesa del hombre al que Estrella había llevado allí.. Una esbelta mujer de unos treinta y pocos señalaba la chaqueta del hombre corpulento en su mesa vacía. El encantador (de serpientes) Chino se encogía de hombros y señalaba al baño a la pregunta de ella.

-¿Donde está mi novio?.

Cabrón dicen que es al que le crecen los cuernos. Hay muchos tipos de cabrones, pero posiblemente el más cabrón de los que cabrones es el que dice algo con malicia, sabiendo que la va a liar, así que de pie junto a ella le dije..

- Le he visto meterse al baño de caballeros con una escultural mujer de grandes pechos.

Añadí lo de grandes pechos a sabiendas que eso le iba a picar, la mujer como norma piensa que su hombre puede desear lo que no tiene, en el caso de esta mujer a pesar de su largo cabello rubio y su escultural figura eran los pechos.

Mientras mi expresión adquiría un tono de media sonrisa maliciosa ella se ponía roja de ira. Empujó con brusquedad la silla que le cortaba el paso y se dirigió hasta el baño. Yo la seguí, bastante divertido por el espectáculo que vaticinaba. Abrió la puerta del lavabo de caballeros. Era amplio, había varios urinarios de pie y un gran espejo con dos lavabos.. Tras la pared de los urinarios un pasillo con tres puertas separadas que daban acceso a tres estrechas cabinas con una taza de water. Las tres puertas estaban cerradas y la enfurecida novia abrió la primera de ellas que estaba vacía. Lo hizo muy despacio y sigilosa, como el que se esconde para dar una sorpresa de cumpleaños. Volvió a cerrar la primera puerta y abrió la segunda igual de sigilosa, no, tampoco había nadie tras esa puerta y ella se colocó delante de la tercera. Se inclinó levemente para ver por debajo de puerta que no llegaba hasta el suelo. Yo la seguía, esperando el desenlace ya próximo, creo que ella ni si quiera se había percatado de mi presencia o decidió no darle importancia.

En el restaurante Chino nuevo mundo casi todo el mundo era feliz. El Chino sonriente cazador de lagartos, yo mismo observando la escena que tan cuidadosamente había creado, incluso el tipo corpulento al que Estrella le hacía una felación cuando se abrió la puerta, parecía de lo más feliz, también Estrella, que chupaba y lamía ese pene como si se fuera a terminar el mundo parecía feliz en ese momento. Bueno, todos ...todos... no parecíamos estar felices, la rubia colorada de ira empezó a gritar...


- ¡ Maldito capullo¡ ¡Te he dicho cien veces que no seas avaricioso y me avises¡, dijo al tiempo que abría su bolso y sacaba un enorme consolador negro de él.


-Pdfavod, cerrab lab puebta, dijo Estrella sin dejar en ningún momento sus operaciones boca-cionales.

Tierra trágame, pensaba yo al ver que me quedaba fuera mientras la puerta del baño de 1.80 de largo por 1.20 de ancho (según legislación vigente) me daba en las narices. Al momento empecé a escuchar un leve zumbido y pequeños gemidos que provenían de dentro. Mi boca abierta acompañada de la cara de gilipollas que se me había quedado mirando la puerta entornada, es lo que debió de sorprender al Chino cuando irrumpió en el baño gritando:

- ¡¡QUE PASAL AQUÍ ¡

lunes, 14 de abril de 2008

Paella de marisco y verduras.

Señoras y señores, hoy vamos a hacer una paella mixta de verduras y marisco y lo que usted vé en la foto son los ingredientes que vamos a utilizar, en la parte de arriba arroz, pimenton, aceite, colorante y sal, en la parte de abajo, anilla de calamar, media sepia(hemos congelado la otra media), ocho gambones, docena y media de mejillones, tomate rallado, 200 grs de gamba arrocera, garrofón y judía fresca y alcachofa. Ni el cigarro, ni el polo beige a rayas azul marino son imprescindibles para hacer esta paella. Se puede hacer de mil maneras, hoy la harémos así.


Hoy tenemos un invitado especial que no les he nombrado, hemos puesto aceite de oliva y sal, y le hemos dado un golpe a cuatro dientes de ajo, que así, sin pelar ni nada, vamos a sofreir en el aceite y a retirar cuando esten bien dorados. Con esto querémos potenciar más el sabor del pescado. Si a alguién le gusta el ajo, pués que se los coma leñe, no me desperdicien nada.
Hemos retirado el ajo, y añadido sepia y calamar. Usted una vez lo lave y antes de ponerlo, deberá meterlo en el microodas un par de minutos para que absorva bastante agua de la que lleva, ese sabor no lo querémos en nuestra paella.



Hemos sofrito, y separado al anillo exterior, y añadido la gamba arrocera. 200 gramos es mucha gamba, ahora le explico que harémos con ella.



Una vez sofrita la gamba arrocera, retirámos parte de ella y se la ofrecémos gustoso a nuestros comensales. Añadimos lla verdura. No olvide este consejo, no le vá a salir mejor cuantos más "tropezones" le ponga, lo importante de la paella es el arroz, usted debe ver el arroz por algún sitio, si nos pasámos de ingredientes comerá de todo, menos arroz.



Hemos sofrito todo y añadido el pimentón, como la otra vez, cuatro vueltas y le ponemos el tomate, que no se nos queme.



Remueva el tomate y mezcle todo bién, por que así, sin agua ni nada, cuando tenga todo bién sofrito usted le vá a poner el arroz.



En este caso tres cuartos de kilo de arroz por que somos seis. A fuego muy bajo para que no se le pegue, lo vá a mezclar todo, ese arroz en crudo, le vá a pillar el sabor de lo que usted ha puesto y le quedará más o menos de esta pinta...




Será un poco antes de añadir el agua,(que tendrá a mano y preparada), cuando le dé fuego con ganas. Utilice si quiere agua caliente para que rompa a hervir lo ante posible. Tenga en cuenta que no querémos que se nos quede el pescado seco y por ello debe hervir lo justo, no como la carne que la dejámos que suelte el sabor, por eso le hemos puesto el arroz antes, le hemos puesto el agua y...




Le hemos dado fuego a toda leche....




Cuando lleve diez minutos de cocción, usted añadirá el gambón (perdón se me movió la foto).

Cuando lleve quince, el mejillón Gallego (viva Galicia, coño). No tema que se le seque la paella, por que ese bendito mejillón, le vá a proporcionar el agua necesaria para que se termine de hacer.




(Esta foto sólo la hice para que vea usted que en la parte superior derecha, un mejillón suelta agua, pero vamos que muy bien no se vé).
Retire del fuego a los veinte minutos, si vé que no se le han abierto todos los mejillones, ponga un periodico encima dos minutos (no más) y se abrirán, y como siempre, deje que repose cinco minutos antes de servir, así se secará bien y le quedará un arroz sueltecito.





Por cierto, debo ser sincero con ustedes, esta paella sólo salió casi perfecta, pero sé por qué, la culpa fué de Pedrosa, Lorenzo y Rossi, en un descuido se me fué el fuego lento que tanto les pregono a una llama alta, y a parte del garrofón se le salió la piel, que más tarde se me quemó un poco. El arroz estaba perfecto, suelto, con su sabor, al igual que los ingredientes, pero algunos trozitos de piel de garrogón no deseados, la dejarón sólo en casi perfecta.

viernes, 11 de abril de 2008

El Homo paellensis.







Dos teorías son las que existen sobre la irrupción del Homo Paellensis en la evolución hasta nuestros días. Una, la de Darwin, otra, la de la Biblia y aquí veremos algunos aspectos de ambas.

Según la teoría de la evolución, el Homo Paellensis estuvo compartiendo tierras entre el Homo Sapiens y el Neandertal. Según los últimos estudios, ambas especies (Sapiens, Neandertal) convivieron en la península ibérica poco antes de la extinción del Neandertal. Algunos avispados Neandertales que vieron como que la cosa no iba a ir bien, por que los Sapiens era muy Sapiens, se fueron en minúsculas tribus a las zonas no pobladas del Mediterráneo donde se instalaron por su cuenta. Fue el jefe de la tribu el que dio en denominar a la especie "Paellensis", en una discusión con su señora y su amante por un extraño recipiente redondo que habían encontrado en las altas montañas. El hombre señaló a su mujer y dijo "paella", más su amante le dijo "que no, pami", a lo que el jefe, con algo de mala leche contestó HE DICHO PAELLA Y ES PAELLA. Y con ese nombre se quedó el extraño recipiente, y la tribu, que adoraba el artefacto como si fuera su Dios, tal vez por que se cambiaban a la mujer del jefe (y le tocaban las tetillas) muy de vez en cuando, adoptó el nombre de Homo Paellensis, por su adoración a la paella encontrada y la señora del jefe, caramba. Con el extraño artilugio, carne de mamut y algo de fuego que les robaron a los Sapiens, el Paellensis dio múltiples usos al artefacto adorado.

Según la Biblia Dios al séptimo día de creación descansó. No solo descansó, también se quedó observando lo que había creado en vez de hacer la siesta, y en un pequeñito hueco de la albufera vio que faltaba algo. "Hágase los patos" dijo, y los patos se hicieron. "Hágase el arroz, el pollo, el conejo, la judía ancha y el garrofón y que las gentes de aqui lo cultiven y mimen hasta mezclarlo todo junto con pimentón y colorante", y así fue como tras multiplicarse, los habitantes de la zona siguieron las ordenes de nuestro creador, más uno de ellos en sus plegarias le dijo "perdóname nuestro Señor, pero creo que con alcachofa ganaría un poco el guiso, y ¿un recipiente para mezclarlo todo no tienes a mano?". Y a imagen y semejanza de la princesa Leia pero con asas en lugar de moños, Dios dio un recipiente redondo esmaltado a sus hijos.



De buena tinta.(2)


En el capítulo anterior, ustedes fueron informados de como se empezó a crear el imperio Mercadona, hoy vamos a avanzar un poquito más en la empresa que nos da de comer a muchas personas, (pagando, eso si) entrando en su política de personal, y próximamente se cerrará el capítulo con la política comercial
Con la empresa formada, y un puñado de supermercados en la provincia de Valencia, se empezó a desarrollar una política de empresa nunca jamás vista en este País hasta entonces, tanto en política comercial como en política de personal. Cuando nadie aqui sabía aún muy bien para qué servía un departamento de recursos humanos (esto se producía por que se vivían tiempos en España de contrato basura, tres meses y a la calle), Mercadona se adelantó y empezó a contratar a todos sus trabajadores indefidademente. Pero no, no se conformaba con eso, además lavaba sus cerebros a nivel de formación, cojiendo como espejo a el Corte Ingles, empresa donde ningún vendedor salía a la sala de ventas sin una espectacular formación como vendedor, y tampoco se conformaba con eso, por que hasta entonces el carnicero, era carnicero, el pescadero vendía pescado, y a partir de ahí se creó una forma de trabajar donde el cliente siempre estaba atendido, pero donde los trabajadores hacían de todo, reposición de lineales, cajas, charcutería, en mercadona uno ya no podía decir "soy carnicero", por que lo mismo estaba cortando carne que cobrando en las cajas. La competencia, algo despistada, seguía con su política de personal de "usted hace catorce horas y le pago 60.000 pelas", mientras que mercadona redujo los turnos de sus trabajadores a siete horas diarias. Lo que consiguió mercadona creo que aún nadie lo ha conseguido en este país al menos en el sector de la alimentación, trabajadores motivados que te dan una imagen de "marca" y están a muerte con la empresa. Es difícil encontrar un trabajador que critique a esta empresa.Esas inversiones en equipo humano el tiempo ha dicho que fueron las mejores de mercadona, los trabajadores estaban plenamente identificados con un proyecto que les daría estabilidad, trabajaban en su barrio y atendían a sus vecinos, cosas que en otras empresas del sector también se evitaba. Con el paso del tiempo todos y cada uno de ellos han podido hacer camino en su vida con mercadona, hasta el día de hoy en que mejoras como un mes más por baja de maternidad (a cargo de la empresa), guarderías y un largo etcétera siguen haciendo de un personal convencido, el mejor activo de la empresa. Todos esos contratos indefinidos han hecho que mercadona a día de hoy, no tenga problemas para la selección de personal, caso distinto a otras empresas del sector.
Y ahora ya quedaba lo peor, antes de expandirse, una politica comercial que convenciera igual a sus clientes. Pero eso ya es otra história.

miércoles, 9 de abril de 2008

La princesa y la gitana.






Érase una vez una princesa que tenía muchos hermanos. Un día de mediados de los ochenta cuando ella contaba con dieciséis años, llamaron a la puerta de su casa. Como mamá estaba trabajando y sus hermanos en la calle, fue ella quién abrió la puerta a María, gitana de nacimiento, y vendedora ambulante los Lunes por la tarde de cremas y perfumes a domicilio.

María era una cincuentona muy ancha de caderas y de ojos grandes, cada semana pasaba por su casa con lo último en cremas faciales, y los más suaves aromas del mercado de aquel entonces. Su tarifa siempre era única, compraras lo que compraras, María siempre te cobraba quinientas pesetas por unidad, lo cual hacía desconfiar si pensabas de donde provenía tan elegante e infravalorada mercancía. La princesa no compró nada por que no estaba su mamá, pero María, sabedora de aquella importante máxima de un cliente, una venta, no se dió por vencida fácilmente y se ofreció a leer la mano de la princesa por una pequeña voluntad. Ella accedió, entró a casa y salió con una moneda de cien pesetas en una de sus manos , ofreciendo la otra a María para que hiciera su trabajo. Entre vaguedades y generalizaciones, la princesa sacó dos conclusiones de aquella lectura de la gitana: Te casarás con un hombre con algo en el pelo, y tendrás dos hijas.

Desde aquel día, además de saber que se casaría, cosa en la que aún no había reparado, la princesa siempre pensó que se casaría con un hombre calvo, y asoció aquella predicción a todos y cada uno de los hombres que eran sus amigos habituales. Tenía amigos de pelo largo y melena, de pelo de punta, de ralla al lado, de cresta, tintados de colores, incluso engominados con el pelo hacia atrás, pero ninguno de ellos era calvo. Pasaron los años y vários amigos, ninguno de ellos calvos, por el corazón de la encantadora princesa.

Fué un día, recién llegada de un veraneo en el pueblo (de las princesas) cuando conoció a un joven macarra motero de larga melena, que se había adherido a su pandilla habitual durante sus vacaciones. "Es un macarra", pensó al verlo, "me cae fatal" y "es un chulito", el macarra solía causar esa impresión en la gente hasta que le conocían, pero por circunstancias de la vida, a su amiga Ana le gustaba un amigo del macarra, y empezaron a salir juntos los cuatro en aquellos tiempos en que, según que gente, necesitaban un "farolillo" para hacer buenas migas con otras personas. Pubs, discotecas y mucho cine hicieron olvidar a la princesa a su hombre calvo cuando empezó a sentirse terriblemente atraída por el macarra de sonrisa simpática. Su amiga Ana y el amigo del macarra nunca hicieron buenas migas, y dejaron de salir los cuatro unos meses después, la relación entre la princesa y el macarra tocaba a su fin.

Una mañana, de casualidad, la princesa se encontró por la calle al macarra, y visto de día era distinto. Tenía la misma pinta de macarra, pero se dió cuenta de algo en lo que nunca había reparado en la oscuridad del cine, ni del Púb., ni de la discoteca, se dió cuenta de que a pesar de su juventud, con la luz cegadora del sol sobre su pelo, el indomable macarra peinaba canas desde la pubertad.

Mejorando la paella.


Usted vá a mejorar hoy la paella del otro día, por que nos vamos a ir de compras y a preparar los ingredientes, y vamos a aprender algunas frases echas de mi tierra, que es absolutamente imprescindible que le lance a la paella en el momento de cocinarla.

Nos vamos a ir a la carnicería, y vamos a comprar medio conejo no muy grande , medio pollo de corral (ojo, de corral, he dicho mejorar) un pedacito de pato, no se pase con el pato que suelta mucha grasa (por cierto, por eso mismo dá igual que sea de la parte de la pechuga, no se queda seco), y le vamos a pedir al carnicero que el pollo, nos lo corte a pedazos chiquitines, y nos saque la pechuga a filetes que aprovecharémos para otra cosa. Entienda usted por pedazos chiquitines que de un muslo, le saque dos trozos, ese sería un buén tamaño para el pollo.


Nos vamos a ir a la frutería y verdulería de Marisa (o similar), y vamos a comprar un par de tomates naturales, evite el tipo "Canario" a no ser que no halla más remedio, tres o cuatro alcalchofas según tamaño, con 1/4 de judia ancha tiene bastante (creo que la llaman perona), y si tiene puede comprar allí el garrofón seco, y si no en Mercadona fijo que lo encontrámos, aprovecharémos para comprar un kilo de arroz redondo, si puede ser marca dacsa y si no el paquete verde de marca hacendado. Supongo que tendrémos en casa aceite de oliva, pimenton dulce, colorante y sal. Como lo querémos hacer mañana, antes de acostarnos vamos a dejar a remojo el garrofón. Ya estámos en la cama, aprovechar el momento para la ejecución de labores amatorias con la señora o señor esposo, por que si no nos sale bién la paella mañana después de la pasta que se ha gastado, vá a dormir en el sofá una temporadita.


Preparación de ingredientes:


Pele y corte la alcachofa en cuatro trozos, y me la ponga a remojo con agua y limón, eso evitará que se le haga negra la alcachofa y luego el arroz.


Lave la judía, y cortelá tras cortar las puntas, en trozos grandes, mucho más grandes que los que vió en la de bote de la foto, saque de cada una dos, como mucho tres trozos si es muy grande.


Lave a conciencia pollo (quitelé si quiere algún pellejillo suelto que luego se le puede pegar en la paella), conejo y pato y dejeló en una escurridora.


Coja el par de tomates y rallelós sin miedo hasta que se quede con la piel en la mano y dejeló en un cacharrito.


Ya tiene preparado todo lo que le vá a hacer falta, coja sal, aceite, pimentón y el garrofón que dejó en remojo (no se le habrá olvidado eh eh eh ) y se lo pone todo a mano en una bandeja o donde quiera. Ya estámos listos para ejecutar. Puede ejecutar la receta tal cual, a exceción del momento de añadir a verdura, que la pondrá al mismo tiempo ya que no es de bote.


Frases indispensables, diccionario Valenciá-Espanyol.


Usted debe hablarle a la paella continuamente, nada de echarle los ingredientes y ¡¡hala, ya os hareis¡¡, por lo que aquí le adjunto un breve diccionario traducido de frases Valencianas, que también le vá a venir muy bién si viene a visitar la comunitat.


IEEEEEEEEE: Hola


AUUUUUUUUU: Adios


IEEE FIL DE PUTAAA ¿A ON VAS? : Saludo a un conocido.


A RAS DE FIGA : Minifalda


A FER LA MÁ: Vayase usted como muy lejos.


PER COLLONS: Necesariamente, por necesidad.


SI LA VISTA NO M`ANGANYA, PORTE UNA BONA CASTANYA: Referente al estado de embriaguez.


MECAGUEN (DEU, DENIA, DEN, LA FIGUERETA, L`HOSTIA): Expresión de multiples aplicaciones, sobre todo si la paella no vá bién.


XE, VES I TOCA`T ELS COLLOS: Usted me está molestando en exceso.


XEEE, QUE BOOOO: Eso me gusta.


JUGA, JUGA I VORÁS: Aplicable a multiples situaciones, suele terminar como l´hostia que t´emportes.


MENGES MES QUE EL TIO SANGONERA: Para cuñados, Sangonera era un personaje de cañas y barro de B.Ibañez que murió de una "fartá" a comer.


BORINOT: Torpe, bruto, cuñado.


AMAGEUSE LES CARTERES: Llegada de alguién inesperado.
Espero sus fotografías si se deciden a hacerla.

martes, 8 de abril de 2008

En el mercado.

El mercado de Benicalap es un mercado municipal que los Sábados es rodeado en sus cinco calles adyadcentes por un gran mercado ambulante. No hay olor a pescado, ni a encurtidos, ni a mezclas aromáticas de hierbas salvo en la zona donde se venden plantas, ya que el mercado de alimentación es un recinto cerrado y bien separado del ambulante, el mercado huele a polución, el mercado huele a calle, huele a Valencia, y una fina capa de humo blanco de la cercana obra del nuevo estadio de Mestalla te seca la boca con rapidez.

En un paseo de Sábado por el mercado puedes encontrar lo que buscas, casi seguro, o pasear simplemente observando las constumbres de la gente, gente que compra y gente que vende, pero sobre todo lo que hoy me ha traido aquí es enseñar a mi hija las nobles artes de la negociación mercadera. Vale, tiene seis años, igual es pronto, pero si me he empeñado en explicarle lo que cuesta ganar el dinero, justo es que le diga cual es la mejor forma de gastarlo en cosas que necesitámos.

En las primeras paradas un grupo de señoras grandes toquetean la ropa bajo un cartel de tallas grandes. Eso creo que en Zara no existe. Tres negros despliegan sus mantas con lo ultimo del top, y una rabalera gitana les grita como una posesa que las retiren de allí por que le cortan el paso a su clientela y ellos no han pagado. Tres o cuatro personas de las paradas cercanas rodean a los negros, que retiran sus mantas con rapidez. Mi hija, poco acostumbrada a oir chillar me dice...- Papá, que mala la señora.

Me entretengo en una buganbilla morada, y unas tomateras que dá gusto verlas con mucho fruto verde en la parada de plantas. Un pequeño naranjo -Naranjas de la Cina, me dice el tendero también llama mi atención.Pasámos las zapatillas Adudas y los polos Naki, malas imitaciones por cierto, y en abanzadilla 50 metros delante, mi Santa con la más pequeña de mis hijas se vá a mirar algo de ropa. La tengo muy mal enseñada, en veinte años aún no he conseguido enseñarle a ser egoista. Sé que al final del mercado ella no habrá comprado nada para ella, y si algo para las niñas, o para mí. De pronto dos paradas más alante diviso mi objetivo en una parada vacía, unos cuchillos de carne con mango sin remaches, y empieza la lección para mi hija.

- Hija mía, papá necesita comprar una docena de cuchillos de carne para casa, y papá quiere pagar por ellos lo justo, vamos a ir a esa parada de ahí y cuando papá pregunte el precio, tu gritarás ¡¡papá, eso es muy caro¡¡. Lo que vamos a conseguir con eso es que el señor nos rebaje el precio, y ese dinerito nos puede venir muy bién para cualquier otra cosa.¿Lo has entendido?.

Ella me mira con los ojos como platos y asiente con la cabeza, vamos directos al objetivo.

- Buenos días, quería seis cuchillos de estos, ¿a como son?.
- 2 Euros la pieza, me dice el señor.
- Papá, eso es muy caro, dice la aleccionada niña.

El hombre se la queda mirando algo alucinado, -Es un cerebro prodigioso, le digo, mientras se empeña en venderme las maravillas del cuchillo en cuestión que casi corta solo sin esfuerzo ninguno y es facilmente lavable.

- Lo siento, eso es caro, le digo.
- Mire, como llevo la mañana floja si se lleva los seis se los dejo a 1.75.
- Mire usted, yo me llevaría doce por 18 euros (a 1.50, vamos).

Me prepara mis cuchillos, le pago y salgo felizmente sonriente a buscar a mi Santa que he perdido de vista, con más explicaciones a la niña sobre la postura elegida para bajar el precio, la importancia de su frase, bla, bla, bla.

Dos calles más allá encuentro a mi Santa, como esperaba ha comprado para la niña un pijama y unas zapatillas, y a mi un polo beige a rayas azul marino de manga corta, pero además de eso observo en la bolsa una docena de cuchillos exactamente igual que los que yo he comprado. No puedo evitarlo, me temo lo peor, que los halla pagado más caros que yo y la lección no halla servido de nada. Le pregunto casi sin aire,

-¿Que te han costado?
- Doce euros
- Pués no se lo digas a la niña....

domingo, 6 de abril de 2008

Paella Valenciana

Amigo-a, hoy vá a aprender usted a hacer una paella Valenciana para cuatro personas.

No tenga miedo hombre, si esto está chupao. Sus comensales se lo agradecerán (excepto sus cuñados, estos siempre se quejaran de algo), incluso puede que le hagan la ola mejicana.
Sin miedo oiga, somos grandes, vamos a mirar a los ojos a la paella, y con gracia salero y fuego muy lento, vamos a meterle mano al asunto.


Lo que usted vé en la fotografía son los ingredientes básicos con los que harémos la paella de hoy, esto es pollo, conejo y pato troceado, (calcule entre todo dos-tres trozos por persona)judía ancha y garrofón. alcachofa ya que es buena temporada, arroz, pimentón dulce, sal, y lo que no vé que también le hará falta, aceite de oliva, tomate triturado y romero, preferentemente en rama y si no pués de bote de mercadona.





Si a usted no le pasa como a mí y se le olvida, es preferente que gaste garrofón seco y lo ponga la noche antes a remojo, si le pasa como a mí, que no esperaba hacer paella y de repente, se encuentra con alguna fiebre de primavera en la familia que le impide salirse, se me vá usted al Apu de su pueblo, (si, el de los Simpson) que está abierto 24 horas y le compra un bote de verdura de paella, esto es garrofón y judia ancha, cocida o congelada, aunque siempre que pueda la gastará fresca.




Si hago paella pequeña no gasto el trípode o tredebe, ya que al ser más alto y la paella más pequeña, se me cuela la ceniza de la leña dentro, unos ladrillos caravista como los de la imagen que pida en cualquier obra le pueden valer, o el fuego de gas de toda la vida en su cocina. Ponémos la paella con un fuego bajo y añadimos aceite de oliva y sal (sin miedo en ninguno de los dos casos, no le vá a salir ni salada ni aceitosa).




Le añadimos toda la carne y a fuego muy bajito, preparámos el sofrito hasta que esta adquiera un tono moreno Zaplana o similar.








Intentarémos mantener el fuego al centro de momento, cuando la carne esté dorada a retirámos al anillo exterior de la paella, y en el centro añadimos la alcachofa , y si fuera fresca la otra verdura. Si es congelada o de bote, esperarémos hasta que se dore la alcachofa para que no se nos deshaga.





Añadimos resto de verdura cuando la alcalchofa está dorada, removémos y salámos de nuevo.




Añadímos el pimentón dulce cuando hemos sofrito un rato y dejámos sofreir el mismo, pero muy poquito antes de echar el tomate, que no se socarre el pimentón que deja mal gusto.




Añadimos el tomate, y removemos hasta que el tomate se fría un poco (lo podrás ver que empieza a hacer pequeñas pompas). En ese momento, con todo bién sofrito, añadirémos el agua, mire, el agua que importa es el que quede a la hora de echar el arroz, eche un poco de más y deje cocer para sacar el sabor a los alimentos.




y dele caña a ese fuego para que rompa a hervir. Le ponga ahora el colorante alimentario y no cuando ponga el arroz, así se deshará en condiciones



Amigo, eso hierve solo, tomesé algo fresquito que hace calor (esto no influye en la paella, pero ayuda a refrescar). Por cierto, no me coma papas o cosas muy saladas o dulces, que aún le tiene que pillar el punto de sal.




Para que se haga usted a la idea, ese es el nivel del agua justo antes de añadirle medio kilo de arroz. Pruebe usted como vámos de sal y rectifique en caso necesario.


Añada el arroz haciendo un surco en el centro y rapartaló. Eso evitará que se le quede arroz por encima de la carne que luego se quede crudo.

Coloque la rama de romero, seca y previamente remojada bajo el grifo. Dejelá justo ocho minutos mientras se consume el agua. Ojo, más tiempo le amargará la paella. Si su romero es de bote y no de rama, espere 12 minutos y añadaló al final.







Diez minutos después de empezar a hervir, usted empezará a ver el arroz por encima de la paella, si no es así ya tarda en darle más fuego







Unos dieciocho minutos después, a usted no le debe quedar casi agua y el arroz debe estar casi seco.



Cuando haga los veinte minutos justos desde que empezó a hervir el arroz, saque la paella del fuego, pero no la consuma, deje que repose cinco minutos antes de servirla. Si tiene romero seco en cantidad, queme un par de ramas (sólo en paellas a leña) justo antes de sacar del fuego, esa ultima llamarada con ese humo bendito, darán a su paella una pequeña capa de "socarrat" o arroz quemado debajo, que posiblemente sea lo más bueno de la paella.

Una norma que tengo yo en casa es que quién hace la paella no la friega. A mi nunca me ha funcionado, espero que a ustedes si.

** Esta receta es para agua de Valencia (del grifo), si la dureza del agua de su zona es distinta, cueza el arroz tanto tiempo como para cualquier otra receta en la que usted cueza arroz, y no se le pase.