lunes, 9 de junio de 2008

007 Contra el Dr. No

- Antes de que me lo pidas me he hecho un hueco para esta tarde y yo llevaré a las niñas a la piscina.
- Anda, pero si hoy podía yo.
- He dicho que las llevo yo, y las llevo yo, y no hay más que hablar.
- Vale nene como quieras.

Se notaba que era Viernes, el curso intensivo de tres días por semana empezaba a acusar sus primeras bajas de presencia al tercer día, una serie de lloroncetes debían haber conseguido dar la suficiente pena a sus mamis como para que hoy no les llevaran a la piscina, de esta forma ambos evitaban el sufrimiento, los peques por su miedo al agua, las madres por ver ese sufrimiento a través de una pecera. Yo las dejé a las dos (arrastradas)y utilizando esa conocida máxima de ojos que no ven, corazón que no siente, cogí sitio en la cafetería frente a siete madres ávidas de aventura cafetil. Si, me sentí como el Dr. No contra siete madres, pues mi habilidad de conversación con ellas radica en llevarles siempre la contraria cuando todas se muestran de acuerdo en algo.

Cuando se vuelve a tocar el tema de la educación el colegios me hierve la sangre, y esta vez no es por llevar la contraria, sino enserio, una señora me salta con el dichoso informe PISA y no me cuesta lo más mínimo callarle la boca cuando le cuento lo que pasó la última vez que estuve en una reunión de la clase de mi hija. La profesora tuvo que decir al viento que con cinco años, no se lleva chupete ni biberón, y que queda instaurado el jueves como día de la fruta para que todos los niños lleven fruta como almuerzo, ya que está hasta las narices de ver bollycaos y donuts. Que se enseñe a los niños en casa a decir por favor para pedir algo, y gracias al recibirlo. Unas sencillas normas de comportamiento con los horarios que deben venir de casa, que de enseñar a leer ya se ocupan ellos si eso, pero que si les comprámos algún cuento y les leemos pues mejor.Cuando un tonto coje una linde, la linde se acaba pero el tonto sigue, así que la madre de un niño de cinco años sigue con el informe PISA como culpable de todos los males educativos de este País.

- A fructibus cognoscitur arbor, termino diciendo sin traducirlo por si acaso me sacuden.

Me ponen al día de la Anita Obregón, hay una mayoría absoluta en su contra, la ponen de vuelta y media por encargar darle una paliza al macizo Cantizano (Cantinazo que le dice mi señora), pero vamos, que una cosa es que me guste llevarles la contraria por costumbre y otra muy distinta las causas perdidas. Y entre educación y Obregón se pasa la hora, y no sé cual de las siete me paga mi cortado.

Una de las madres informa al resto de que en el vestuario de padres con niña no suele haber gente, mientras el otro está a parir. Claro, esta se saltó la clase del colegio en que enseñaban que un cartel de "padres con niña" quiere decir que el vestuario es para "padres con niña", y no para madres con niña o niño. Así enseñamos a nuestros hijos el órden y el respeto.

LA CULPA DE LOS EDUCADORES COÑO.

7 comentarios:

Sr.DelGaS dijo...

Pues no te está dando de sí la piscina... ¡te lo pasas mejor que los congresistas americanos!

Arkab dijo...

Oiga, Trikki, usted que gafótero como yo, ¿cada cuántos años cambia de binoculares? Yo las cambio más o menos cada tres o cuatro años, desde que me salen tan buenas las japonesas, pero he visto unas fotos con diez años de diferencia de un señor a medio camino entre el último Supermán de calle y Mozito Feliz y he comprobado atónito que tenía las mismas gafas en las dos fotos.

Trikki dijo...

Oiga, pues yo cambio a ojo, que no por moda, quiero decir cuando necesito una revisión, las ultimas hace unos tres años, y encima me las hizo un optico Frances que patrocina Roland Garros que por un euro más me dió otras, que por cierto no me suelo poner por que son modernamente moradas y lñas tengo nuevecicas. Resumiendo, que si sigo viendo bien las aguanto, no las cambio por moda, por que realmente si quiero estar como Benicio de guapo pero con cintura, me las quito, y no me las suelo quitar por que me dicen que voy provocando a las masas que me confunden con el Clooney.

Resumiendo, las que llevo estan casi nuevas, y las otras nuevas del todo, pués calcule siete años más

Harry Sonfór dijo...

Arkab, pregúntese si ha observado detenidamente la patilla de los dos pares de gafas. Así como Giovanni Morelli presumía de diferenciar un cuadro auténtico de otro falso observando la forma que el pintor daba a las curvas de los pabellones auditivos, una buena manera de descubrir si unas gafas son iguales o diferentes a otras consiste en comparar el ancho de las patillas y no su color o su material.

Harry Sonfór dijo...

Oiga, Trikki ¿Ha preguntado a ver si alguna de esas madres son blogueristas? que es que no nos entra nadie nuevo a hablar y algo tendremos que hacer, que yo ya les he contado todos mis secretos (salvo el de Zafón, ojo).

Trikki dijo...

Pues Harry eso mismo me preguntaba yo, por qué con esos poblados Fidjis, ni Polacos (Viva Kúbica) ni Mexicanos (Viva Shalma) ni Finlandeses (Aupa Kimi) ni Argentinos (Viva mi dentista y mi Psicoanalista)ni si quiera Españoles (nuevos miembros o miembras que diría la nueva ministra) se pronuncian o manifiestan nunca.
Y mire que yo empeño le pongo, con temas universales como las tetas, los coitos sobre la lavadora, el rock de la cárcel, pero nada, que no hay manera de que digan ná.

Seguirémos probando con otros asuntos de interés general.

Badil dijo...

No se si aconsejarle que cambie de colegio a sus niñas.Yo ya he pasado la etapa APA, pero la recuerdo casi con nostalgia...Claro que hoy igual acabábamos en el juzgao de menores perdiendo la patria potestad. En las excursiones se fumaba, se bebía...En las fiestas del cole las cocineras hacían agua de Valencia (de la receta no respondo de los resultaos si)y acababan con batallas de globos de agua que nadie se explica cómo se convertían en pozales de agua contra preferiblemente el director y el padre que trabajaba en el Banco de España. Manías.
Joer que tiempos