miércoles, 2 de julio de 2008

Los borrachos y los niños, ¿Nunca mienten?

Puede que halla cuatro tipos de bares o restaurantes. El bar que no tiene mantel, el bar que tiene ese mantel pequeñito de papel de sobremesa, el bar que tiene mantel de papel de colorines, y el bar que tiene mantel de tela en su mesa. Barriobar es una cadena de bares de esta zona que alguién tuvo a bien inventarse como franquicia. Es el bar de barrio de toda la vida, con sus bravas,calamares, verduras y tortillas creado para funcionar como un pans & company o un Mcdonals, pero en bar tradicional. Unas marcas habituales de cervezas, cafés o refrescos los financian y todos tienen el mismo suelo, el mismo plasma , la misma imagen, y el mismo azulejo fallero en su baño, fallera con peineta para ellas, fallero labrador para ellos, pero cada uno es de un dueño que hace sus pedidos a una central de compras y ahí está el beneficio de la franquicia.

Barriobar es un bar de mantel de papel de colorines rojo fuerte y servilletas a juego donde la tapa es su principal virtud pero no la única, en las comidas hacen una serie de menús caseros, y para la cena unos platos combinados a base de carnes, pescados o mariscos según te apetezca.

Cuando un cuarto de hora antes de la hora prevista entro en el Barriobar asignado por las madres organizadoras de la cena de madres de niños de curso de piscina 2008, no hay nadie. He estado sopesando si valía la pena llegar antes o después de la hora fijada. Si llegaba tarde sería el centro de atención de las miradas, aunque por otra parte podría dar la vuelta e irme sin que me viera nadie tras dar un vistazo si no me convencía el asunto. Si llegaba antes ya estaría dentro y podría observar disimuladamente desde un rinconcito, pero que el bar esté absolutamente vacío ha roto mis esquemas, así que me pongo en la barra y pido una cerveza. Me dirijo a una de las camareras, tras la barra, y le pregunto.

- ¿A qué hora era la cena que os han contratado?
-¿La de madres de niños de curso de piscina 2008?. A las nueve y media ¿Es que esperas a alguna?.
- No, no, que vengo en representación de mis niñas.

Bien, la primera en la frente, eso me indica que no debe de haber muchos hombres en la cena.
¿Se ha preguntado usted el por qué cuando quedan un montón de señoras para juntarse por cualquier razón a cenar sin hombres se ponen todas minifalda?. Yo sí, pero no he encontrado una respuesta para dársela, y allí que empiezan a entrar por grupitos de madres y yo que me empiezo a poner colorao por momentos. ¡Por fin¡. Veo entrar un hombre junto a una señora. Ooooohhhhhhhh, le da un beso, se despide y le dice "llámame cuando quieras que venga a por tí".
Veintitrés señoras llevo contadas cuando entablo mi primera conversación de la noche con ¡la madre reivindicativa¡, que precisamente está reivindicando que ya son las nueve y media a la camarera y que mueva el culo que tiene hambre. Me he quedado habilidosamente de pie en la barra para sentarme en el sitio donde me dejaran libre. No se por qué, de una mesa montada a lo largo me han dejado la parte estrecha de uno de los lados, cosa que me llena de satisfacción cuando veo que la otra punta de la mesa la ocupa la dichosa madre reivindicativa. Empezamos a cenar.

Llevo memorizado un chiste de un loro que aprendí ayer por si se da la ocasión y a estas horas con una cerveza consumida lo recuerdo perfectamente. Empiezan a ponernos tapas, llenan la mesa de bebidas varias y observo que muchas señoras guardan la elegancia para mejor ocasión y se ponen a tragar a saco. Tras los primeros platos lo que era murmullo se convierte en griterío, menos mal que el bar está vacío por que esto parece un corral de gallinas desbocadas. Bebo para olvidar por que empiezo a escuchar conversaciones un tanto extrañas sobre fútbol, más concretamente sobre cuerpos de futbolistas en calzoncillos con cava en la mano. Llevo ya unas cuantas cervezas en el cuerpo y en la zona donde estoy se empieza a escuchar la juerga a mi alrededor. La otra parte parece que son del grupo madres estiradas de niños de curso de piscina 2008.

¿Como era el chiste del loro?. Es el momento, pero sólo me acuerdo del final. Empiezo a hilarlo despacito en mi mente para soltarlo con el mismo arte, salero, gracejo y desparpajo que lo leí.
Bedbo otrod poquitos miendtras indtento recordadlo. Estamos con la tarta y con el cava y yo que no he contao el chiste por que no he conseguido montarlo en orden en mi mente. Una de las madres a mi lado me pregunta. -¿Y tú no te sabes ningún chiste?. Y le digo gritando:

- SI ME TIRAS DE LAS DOS PATAS A LA VEZ ME CAIGO ¡JOPUTA¡. Otia, se he empezado por el final.

Pero es igual, ellas se descojonan lo mismo o más por su estádo de embriaguez y yo no sólo les hago juego, sino que me quedo enganchao de la risa y ellas aún se ríen más de verme a mí, ante la lejana mirada del grupo de madres estiradas de niños del curso de piscina 2008 que claro, tiene los vasos llenos de bebida. La madre reivindicativa que se pone en pie en la otra punta de la mesa diciendo que vamos a hacer un brindis, y las de mi lado y yo que no podemos parar de descojonarnos, si le escucho alguna barbaridad creo que me meo allí mismo. Con voz solemne y seria dice:

- ¡Por que el año que viene nos volvamos a juntar todos¡

Bien, no ha estádo mal, podía haber sido peor, pero como me parece muy serio el brindis para el estado de las madres de niños de curso de piscina 2008 que están junto a mí, me pongo en pie dando golpes a mi copa con la cucharilla y reclamando la atención del personal.

- ¡POR LOS MONITORES MACIZOS¡

Aplusos, biennnnn, bravooooo, yujuuuuu, y no se por qué razón mis compañeras de mesa entienden que tienen que hacer un brindis cada una, y esto se convierte ya en un concurso de burradas, a ver quien la dice más gorda. Se levanta la primera.

- BRINDO POR QUE BRINDO, POR QUE TENGO QUE BRINDAR, POR QUE TENGO UN CHOCHO LINDO, QUE LO TENGO QUE ESTRENAR.

La locura colectiva, hasta las estiradas madres de la otra parte empiezan a chillar y reir como posesas, las camareras que empiezan a mirarnos con cara rara y se levanta la segunda.

- CON ESTA COPA Y ESTE AUJERITO, PASAMOS LA NOCHE TÚ, YO Y TU PITO.

El estado de los presentes empieza ya rozar la borrachera, yo ya sé que grite lo que grite se van a descojonar, así que me vuelvo a levantar y grito:

-SI ME TIRAS DE LAS DOS PATAS A LA VEZ ME CAIGO ¡JOPUTA¡ y me encano a reír totalmente acompañado por todas las madres de niños de curso de piscina 2008. Tengo que levantarme al baño para serenarme un poco. Me lavo la cara y me refresco, cosa que aprovecha una de las camareras para esperarme en la puerta y decirme que es la una, y que hay que ir plegando que mañana madrugan. La mesa ya está un poco más calmada a mi regreso y pongo voz de persona responsable para decir que hay que largarse.

- AHÍ ENFRENTE CONOZCO YO UN KARAOKE, grita la madre reivindicativa.

Para mi sorpresa no hay bajas al ir de un sitio a otro, suele pasar que alguien se canse y se quiera marchar, pero nada, que como el único que quería marcharme era yo, aguanto por no quedar como una nenaza sin minifalda. Entramos al Karaoke, pero eso...ya es otra historia.

5 comentarios:

Sr.DelGaS dijo...

Joder tío... yo no sé como accediste a meterte ahí, por lo menos pillarías, ¿o tampoco?.

Santa Madonna...

Arkab dijo...

Trikki, la próxima vez aproveche su cinefilia (ojo, Trikki, no vaya al diccionario que «cinefilia» no es nada sexual) y cuénteles la anécdota aquella que les ocurrió a Lassie y Rin-Tin-Tin la vez que acudieron al Festival de Cannes.

Trikki dijo...

Cinefilia, zoofilia, oiga pues suena casi igual.¿seguro que no es nada sexua?.

Arkab dijo...

Que no, en serio, que no es nada sexual. Si quiere algo sexual y arriesgado le sugiero la timbrofilia (coleccionismo de timbres impresos en papel sellado del Estado). Eso sí que pone, para ello necesitará una lupa enorme y una secretaria querendona. Después ya sólo es dejarse ir.

Harry Sonfór dijo...

Pues acaba usted de hacer realidad una de mis fantasías sexuales. Una cena con madres borrachacas en minifalda.