Cuando una persona tiene que contar algo de esta índole tiene cierta tendencia a avergonzarse, yo sin embargo abro mi corazón a todos ustedes para decirles sin ningún tipo de vacilamiento que no, a día de hoy no se me levanta, y es curiososo, por que esto me sucede desde hace un par de meses.
Desde la primera vez, aún la recuerdo como si fuera hoy, que se desbordaba por el molde al efecto, de un tiempo a esta parte el bizcocho no se me levanta lo suficiente, y se me queda como una masa cruda mal hecha y bajita. He probado a colar la harina, a añadirle más levadura, pero no consigo que se me levante portentosamente como antaño. Miento, sí, se levanta vigoroso dentro del horno, pero es sacarlo y dejarlo enfriar y otra vez para abajo. Comentando el asunto con una amiga me dijo "pero dejarlo dentro del horno, con el horno apagado", siendo el resultado tras la prueba el mismo.
Reviso los ingredientes periódicamente por si es problema de que me dejo o le pongo algo de más, que va, si es sencillo el bizcocho, huevos, harina,aceite de girasol, azúcar, levadura, un yogurt natural y a darle al meneito. Que yo pensaba que el que no se me levantara, podía ser cuestión de darle tanto al meneito manual, con las barillas pasteleras, y me dije "pues a maquina, con la batidora y salga el sol por donde quiera", y ni a mano ni a máquina, que me sobran tres dedos de molde cuando antes me sobresalía por encima y llevo ya tres tartas iguales.
Preocupado me hallo, que la temperatura sigue siendo la de antes, el horno es el mismo (y lo digo por que muchos de ustedes estarán pensando, que quizás sea un problema de cambiar de horno, que este horno está muy quemado o muy visto o utilizado) en el que hasta hace nada me salía alta, grande, vigorosa y esponjosa a la par, con su azúcar quemadita por encima, la temperatura la misma, el molde de lata el mismo, y los pasos a seguir los mismos, que hasta he probado a quitarle el yogurt y nada, que sigue sin levantarse como Dios manda
¡Qué recuerdos aquellos fabulosos días¡ Cuando salía del horno bien grande y hermosa, que era la envidia de propios y extraños, esas ovaciones cerradas, ese vecindario orgulloso "Pues a mi marido no le sale tan tiesa",quizás, no sé, pueda ser el estres, que no le pongo el mismo cariño, igual son los huevos, sí, seguro que son los huevos que ahora son de gallina, y los de antes pues también, o la harina que es la misma. o una partida de levadura en mal estado. No sé, seguiremos investigando.